Autómata | Sin referenciar | | Máquina que imita la figura y los movimientos de un ser animado. Los autómatas que imitan las formas naturales y que están hechos fundamentalmente para suscitar el asombro, tiene un origen helenístico-alejandrino. Entre sus autores sobresale Herón de Alejandría, inventor de numerosas obras y especialmente recordado por sus pájaros cantores. Luego se repiten las noticias sobre obras admirables y sorprendentes tanto en las culturas orientales, como en las árabes y occidentales. En el mundo árabe son fundamentales los libros de Al Gazari y de Ridwn. A fines de la Edad Media son frecuentes en la Alemania Occidental, sobre todo en los talleres de Ausburgo y Nuremberg. Merecen recordarse muchos relojes de nuestras catedrales y otras obras perdidas, como el sepulcro de Don Álvaro de Luna de Toledo, con figuras que se alzaban y se arrodillaban. Ya en la Edad Moderna son importantes los libros sobre la construcción de estas máquinas de Ramelli (París, 1588) y Salomón de Caus (1615).
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En el siglo XVIII son importantes los cuadros mecánicos, y los androides, que imitan las acciones humanas. Desde entonces, hasta los actuales robots, puede seguirse la tradición ininterrumpidamente. | Se desconoce fuente. |